Un tema importante para los residentes de toda comunidad es el de los gastos comunes que deben pagar para que su condominio funcione adecuadamente. A lo menos un 50% de estos recursos se destinan al pago del sueldo de los trabajadores, en tanto que el resto solventa las mantenciones de ascensores, calderas, bombas, jardines, piscinas, etc, además de ciertos consumos de luz, gas y artículos de aseo, entre otros costos.
Además del sueldo de trabajadores, el gas es un ítem caro, en aquellas comunidades donde se provee el agua caliente. Rafael Merino, miembro del directorio del Colegio de Gestión y Administración Inmobiliaria de Chile, CGAI, explica que «las calderas de un edificio deben mantenerse prendidas 24X7 independientemente de que se esté usando o no agua caliente en un momento dado».
Agrega que hay incrementos que son más estacionales. «En invierno sube el consumo de agua caliente, electricidad y calefacción para aquellos edificios que cuentan con este servicio, lo que deriva en que los gastos comunes aumenten hasta un 30% o incluso más, dependiendo de la comunidad. En tanto, en verano, los gastos comunes suben entre un 20% y 40% principalmente por concepto de las vacaciones, ya que se debe cubrir al personal que no está contratando reemplazos».
En cuanto al plazo que es posible dar a los residentes para pagar sus gastos comunes, comenta que éste puede variar. «En la medida que una comunidad cuente con una buena cantidad de dinero se puede dar un mayor plazo para el pago de los gastos a aquellas personas que están atrasadas. El problema se presenta cuando no se dispone de tanto dinero, hay una alta morosidad y existen, por ejemplo, reparaciones extraordinarias que debes solucionar y cancelar. Acá es importante el tipo de mantenedor que uno tenga y cómo te puede ayudar financieramente dándote crédito».
Si bien en ocasiones se ha planteado que es posible disminuir significativamente las deudas por no pago de gastos comunes mediante una administración más eficiente, Rafael Merino enfatiza que «rebajar la morosidad depende exclusivamente de que la gente pague y la única opción que tiene el administrador para controlar esto en forma real es mediante el corte de luz a los 3 meses de no pago. Antes puedo enviar circulares y hablar con la gente, pero ello no siempre es suficiente».
Añade que ahorrar en ciertos ítems para reducir la morosidad en gastos comunes es un tema relativo, pues no se puede prescindir de un cierto número de trabajadores ni intentar ahorrar en mantenciones, ya que en el tiempo ello podría resultar más caro. Concluye que si bien se podría gastar menos en materia de compras como artículos de aseo, se trata de montos insignificantes comparados con el gasto total de una comunidad.
Consultado sobre la situación de pago de gastos comunes en las comunidades que administra, el miembro del directorio de CGAI concluye que, afortunadamente la gran mayoría de los residentes han podido cumplir con sus responsabilidades, aportando así al adecuado funcionamiento de los condominios.
CGAI CHILE